Ricardo Lagos pasa por la historia sencillamente como un viento malo, que no fue capaz de levantar las hojas feas y podridas de largo invierno para dar espacio a la ansiada primavera por millones anhelada y que le prometieron.
Por favor Sras. y Sres. Presidenciables: como líderes que aspiran a dirigir un país que quiere ser desarrollado: exijan a sus respectivos equipos que sean rigurosos en sus anticipaciones, ofertas y programas.
“Miente, miente, miente que algo quedará; cuanto más grande sea una mentira, más gente estará dispuesta a creerla” (Joseph Goebbels, Ministro de Propaganda de Adolf Hitler, 1939-1945).